El Salto del Batán está situado en el paraje de Pozos Altos, a tan solo 3 kilómetros de Calcena. En dirección a Trasobares por la carretera comarcal A-2302, encontrarás un panel interpretativo junto con una señal de madera que marca el lugar. Aquí, hay una zona de estacionamiento disponible para los visitantes. Desde este punto, un sendero sencillo y corto te llevará rápidamente al Salto del Batán, un lugar de extraordinaria belleza natural que destaca por su bonita caída de agua y entorno pintoresco. 

La cascada, especialmente caudalosa tras las lluvias, era utilizada antiguamente para el bataneo de paños, de ahí su nombre. Más tarde, la zona albergó un viejo molino harinero, accesible mediante un antiguo puente románico que aún se conserva y que ha permitido durante siglos cruzar el río Isuela. El sonido del agua cayendo y la frescura del aire hacen de este rincón un refugio perfecto para quienes buscan escapar del bullicio urbano y sumergirse en la tranquilidad del paisaje moncaíno.

Este enclave de la Comarca del Aranda es muy querido por los calcenarios, ya que durante siglos fue un lugar popular para bañarse y disfrutar de meriendas con familiares y amigos.

Paisajes del Agua